Los Trastornos de Conducta Alimentaria son trastornos psicológicos graves que acarrean una alteración en la conducta alimentaria de una persona. Este tipo de trastornos también son conocidos como TCA. Un TCA puede llevar a una persona a comer de manera descontrolada o incluso a dejar de comer totalmente.
Se trata de un problema psicológico que afecta más comúnmente a adolescentes entre 15 y 18 años y mujeres jóvenes. Los factores más influyentes suelen ser factores biológicos, de personalidad y factores sociales. Los Trastornos de Conducta Alimentaria afectan los ejes médico-nutricional, psicológico-emocional y conductual.
Otro factor muy influyente es la obsesión por un peso ideal, como en los casos de la bulimia o anorexia.
Los Trastornos de Conducta Alimentaria más comunes
A continuación se detallan de forma resumida los Trastornos de Conducta Alimentaria más comunes:
Anorexia
Las personas que sufren de anorexia experimentan un profundo miedo a engordar, es un trastorno alimentario que causa que las personas pierdan más peso de lo que se considera saludable para su edad y estatura.
Hay muchos factores involucrados en esta enfermedad, desde factores genéticos y hormonales hasta actitudes sociales que promueven cuerpos muy delgados. Los factores de riesgo para la anorexia incluyen:
- Prestar excesiva atención al peso y la figura.
- Tener una imagen negativa de sí mismo.
- Ideas culturales o sociales respecto a la salud y la belleza.
- Tener un trastorno de ansiedad en la niñez
Conseguir ayuda médica de inmediato puede hacer que un trastorno alimentario sea menos grave.
Perder peso pero no salud
La anorexia o la bulimia son a menudo fruto de la obsesión por perder peso, por ello, a la hora de perder peso es muy importante mantener la salud, por lo que siempre es conveniente contactar con un nutricionista de confianza.
Bulimia
La bulimia es un trastorno alimentario por el cual una persona tiene episodios regulares de ingerir una gran cantidad de comida, sintiendo así una perdida de control sobre la comida. Tras esto, la persona utiliza diversos métodos para evitar aumentar de peso, como vomitar o consumir laxantes.
Este trastorno es mucho más común en mujeres que en hombres. Los principales síntomas de la bulimia son los siguientes:
- Provocarse el vómito.
- Uso de laxantes o diuréticos.
- Ejercicio excesivo.
Las personas que sufren de Bulimia rara vez necesitan ser hospitalizadas. Sin embargo, es muy común que este trastorno se entre cruce con la anorexia, dando lugar a personas que sufren ambos trastornos alimenticios.
Trastorno por atracón
Se trata de un trastorno semejante a la bulimia, pero difiere en algunos factores. La persona con trastorno por atracón tiene episodios repetidos de comer una gran cantidad de alimentos en poco tiempo.
Este tipo de episodios se viven con sensación de descontrol y en ocasiones aunque no se tenga hambre, después, las personas pueden llegar a sentirse culpables o avergonzados.
A diferencia de la bulimia, en este tipo de trastornos no hay conductas compensatorias, en otras palabras, la persona afectada no vomita, ni hace ejercicio físico de forma compulsiva.
Es conveniente que los afectados por este trastorno acudan en busca de ayuda en manos de un psicólogo profesional o nutricionista.
Vigorexia
La Vigorexia es un trastorno mental en el que la persona afectada muestra una obsesión por su estado físico, lo cual afecta a su conducta alimentaria y a sus hábitos de vida.
Las personas con vigorexia creen que su cuerpo no es suficientemente musculoso y que deben ejercitarlo constantemente. En este caso, la mayoría de las personas afectadas por esta patología son principalmente hombre entre 18 y 35 años.
Se trata de una afección grave que puede llegar a ser crónica dando lugar a síndromes más complejos, por ello es importante buscar ayuda profesional lo antes posible.
Factores de riesgo para desarrollar un TCA
Los Trastornos de Conducta Alimentaria son enfermedades multicausales, es decir, hay diversas causas y factores que pueden afectar y provocar el desarrollo de un TCA. Estos factores pueden ser de tipo individual, social y grupal.
Factores individuales
- Rasgos psicológicos: Algunos rasgos de personalidad, como un alto grado de autoexigencia, excesivo perfeccionismo u obsesión por la búsqueda de un peso ideal, están muy relacionados con la aparición de un TCA.
- Baja autoestima: Tener una baja autoestima, además de unos rasgos de personalidad con tendencia a la introversión y la inseguridad hacia uno mismo incrementan la probabilidad de desarrollar TCA.
- Obesidad: La obesidad se considera como un factor de riesgo para desarrollar un TCA.
- Adolescencia: Durante la etapa de la adolescencia existe un mayor riesgo de desarrollar un TCA.
- Sexo femenino: De cada 10 casos, 9 son mujeres por lo que ser mujer implica un mayor riesgo.
- Predisposición genética: El riesgo de sufrir un TCA es mayor si existe el antecedente de un familiar con un Trastorno de Conducta Alimentaria, aunque este no es un factor determinante.
- Presión social respecto la imagen: El ideal estético de belleza es difícil de conseguir para la mayoría de personas. Los medios de comunicación favorecen esta presión social asociando de manera reiterada la delgadez con el éxito personal.
- Modelo de belleza: Nuestra cultura promueve estereotipos y valores en los que se premia el aspecto físico por encima de otros valores.
- Experiencias anteriores o traumas: Las personas, especialmente en el caso de niños y adolescentes, que han recibido críticas y burlas relacionadas con su apariencia física y que debido a esto se han sentido inseguras con su imagen presentan una mayor tendencia a desarrollar un trastorno alimentario.
Factores familiares
- Educación familiar: Aquellas familias en las que no se potencia la asertividad y la autoestima favorecen la aparición de dificultades personales que pueden conducir a un trastorno alimentario, así como las familias que dan mucha importancia a la delgadez y al aspecto físico.
- Ambiente familiar desestructurado o sobre protector: Las familias en las que no existe una estructura estable y segura, o, por el contrario, aquellas en las que la comunicación y la dinámica familiar es excesivamente rígida, controladora y exigente pueden influir en el desarrollo de uno de estos trastornos.
Marhela es un Centro de Psicología en Vitoria-Gasteiz donde estaremos encantados de atenderte. Si crees que tú, o alguien de tu entorno cercano sufre alguno tipo de Trastorno de Conducta Alimentaria o algún otro tipo de patología, no dudes en contactar con nosotros, cuanto antes se busque ayuda profesional menor se agravará la situación.