El trastorno bipolar es una condición de salud mental compleja que afecta el estado de ánimo, la energía y la capacidad de una persona para funcionar en su día a día.
Quienes conviven con alguien que padece este trastorno (ya sea un familiar, una pareja o un amigo) a menudo se enfrentan a desafíos emocionales y prácticos. Saber cómo tratar a una persona bipolar no solo mejora la relación, sino que también puede ser un pilar fundamental en su bienestar.
¿Qué es el trastorno bipolar?
El trastorno bipolar se caracteriza por cambios extremos en el estado de ánimo que van desde episodios de manía (euforia, hiperactividad, impulsividad) hasta fases de depresión (tristeza profunda, fatiga, desesperanza). Estos ciclos pueden durar días, semanas o incluso meses, y requieren un diagnóstico médico y seguimiento profesional.
Claves para tratar a una persona con trastorno bipolar
- Infórmate sobre la enfermedad
La comprensión es el primer paso hacia la empatía. Aprende sobre los tipos de trastorno bipolar (tipo I, tipo II, ciclotimia), sus síntomas, desencadenantes y tratamientos disponibles. Esto te permitirá interpretar su comportamiento desde una perspectiva clínica, no personal. - No minimices sus emociones
Evita frases como “todo está en tu cabeza” o “anímate”. Estas expresiones invalidan su experiencia emocional. En lugar de eso, ofrece apoyo con empatía: “Estoy aquí para ti”, “¿Cómo puedo ayudarte ahora?”. - Sé un apoyo, no un terapeuta
No intentes “curarlos” o resolver sus crisis por tu cuenta. Tu papel es acompañar, no diagnosticar. Fomenta que sigan su tratamiento médico, acudan a terapia y tomen la medicación prescrita. Si rechazan el tratamiento, habla con respeto y ofrece opciones, no imposiciones. - Aprende a detectar las señales de recaída
Con el tiempo, podrás identificar patrones que anuncian un episodio maníaco o depresivo: insomnio, habla acelerada, aislamiento, irritabilidad, falta de energía… Compartir tus observaciones con la persona y su entorno clínico puede ser muy útil. - Establece límites saludables
Acompañar a alguien con trastorno bipolar no significa tolerar conductas abusivas o dañinas. Pon límites claros y cuida tu salud mental. A veces, decir “necesito ayuda” o “esto me sobrepasa” también es un acto de amor. - Promueve hábitos estables
Rutinas sanas, como dormir bien, comer equilibradamente, evitar el alcohol y mantener horarios regulares, son beneficiosas. Si vives con esta persona, puedes fomentar ese entorno estable y predecible que tanto ayuda a estabilizar el ánimo. - Cuida tu bienestar emocional
El desgaste emocional es real. Considera acudir a terapia o unirte a grupos de apoyo para familiares y cuidadores. Estar bien tú también es una forma de estar mejor para el otro.
Tratar con una persona con trastorno bipolar requiere paciencia, información, empatía y también autocuidado. No estás solo, existen recursos profesionales y comunidades de apoyo. Acompañar no significa cargar; significa caminar al lado. Y eso, bien hecho, puede marcar una gran diferencia.
Si necesitas ayuda o asesoramiento puedes ponerte en contacto con nuestra consulta de psicología en Vitoria-Gasteiz.